Quien lo creyera. Sí había comida pa’tanta gente. Y gratis. La multitud, cada vez más numerosa resistía los 35 grados de temperatura de un sol furioso que caía sobre este corregimiento habitado por comunidades negras y pertenecientes al municipio chocoano del Medio Baudò. El río complacido esperaba a sus bañistas.
Por Antonio Sanchez/fotoperiodista
La invitación que se hiciera desde el consejo comunitario del Corregimiento de Pie de Pepé a todos los habitantes del Chocó y otros de fuera de la región, desbordó la asistencia. Y no era para menos. El rió que lleva su nombre, cristalino y coqueto. lento como no queriéndose ir, seducía las lozanas y seductoras caderas de estas esbeltas mujeres y atléticos caballeros Un romance familiar en medio de la selvática subregión de la zona norte del Chocó. Un frondoso y colorido paisaje que enamoró a más de uno.
El Festival del agua fue una bien pensada iniciativa de la docente Ana de Jesús Ibarguen, quien en vida y luego de convertirse en una legendaria líder de la región, quiso en su empeño fundacional que las familias de ésta comunidad se fueran de paseo para alegrarse el rato, disfrutar de la naturaleza y hablar de la vida y obras sociales para la localidad. Limar algunas asperezas o enemistades entre sus vecindades fue otro de los propósitos.
Y fue precisamente en la playa del kilómetro 20, de la vía que conduce a la sub región del Baudò, a escasos 500 metros del casco urbano de Pié de Pepé, quien atestiguó esta primer convocatoria de tan solo cuatro familias. Hoy, superan más de 50 y tras ellas unos tres mil turistas
. Fotos/El Baudoseño
La tarde soleada, de rumba, comidas, piscinas naturales, vendajes y canto, del pasado dos de enero, fue amenizada por el grupo de danzas de la Fundación Serranía. Dentro del acto fueron homenajeados varias personas con la medalla al mérito Ana de Jesús Ibarguen y el Recatón al liderazgo, en su tercera versión.
Caminar este lecho natural, avistar las aves, comer un rico marañón, una dulce y rojiza papaya de los tantos árboles frutales que bordean la fuente de agua pura y transparente, sentir la suavidad de sus piedras por entre los dedos de mis pies, tocarlo, mirar el cielo azul por el espejo que nos ofrece la magia de sus aguas, y no cansarme de retratar su candor y galantes cuerpos de hombres y niños y mujeres, fue uno de los placeres saldados en mi existencia.
El desfile de las bellísimas chicas Verano y de la Diosa del Agua, subieron aún más la temperatura y alegraron la tarde. 15 hermosas y bien trajeadas niñas que simbolizaron “con sus atuendos el cuido y el amor por el río que les proporciona el agua para el consumo”, así no lo hizo saber su inspiradora Eris Consuelo Mosquera, miembro del comité organizador.
Jhon Jairo Mosquera, líder de la región, nos informó que: “el río Pepé, es el cuerpo de agua mejor conservado y limpio en el mundo. Sus lugareños así lo han decidido no permitiendo desde hace 38 años ninguna actividad minera en su caudal, tributo del Baudò. Preferimos el agua pura y la protección de la flora y la fauna que los miles y miles de pesos que nos pudiera proporcionar el oro que se encuentra en sus entrañas. Frente a esta comunitaria defensa del territorio, del oxígeno y de la vida, no contamos con el apoyo de los entes territoriales, del Ministerio del Medio Ambiente, ni de Codechocó”
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El megaconcierto
El disfrute de las aguas cristalinas del rio Pepé y de su exótico y conservado paisaje, fue la antesala de lo que sería el megaconcierto, nunca visto en una localidad del Chocó, coincidieron en afirmar sus beneficiarios.
El Festival del Agua, donde se le hace un tributo al preciado líquido y a la protección de la cuenca hidrográfica, ha sido, dijeron sus moradores, la perfecta excusa para el reencuentro de amigos y familiares. Por ello las gentes, venidas de distintas regiones del Chocó y del país, colapsaron la vía con el parqueo de una extensísima hilera de vehículos. El gozo entre pecho y espalda de los casi 3 mil visitantes fue notorio. No hubo un solo brote de peleas o rencillas durante el festejo hídrico.
El Cepo.
Los organizadores recurrieron a la historia construyendo un Cepo a base de madera para llevar e inmovilizar durante casi 20 minutos a quienes alteraran la fiesta: peleadores, generadores de rencillas, contaminadores del medio ambiente y a quienes con sus groserías y altanerías acosaran y violentaran a hombres y mujeres. Situaciones que no ocurrieron durante la jornada. Y quien inició con el ejemplo y parodia, fue precisamente el alcalde y uno de los concejales, a quienes , conducidos por los inspectores ocasionales fueron apresados y sometidos durante 15 minutos bajo el sol canicular. Los curiosos a su alrededor celebraron la acción con burlas y risas.
El plato fiestero bien seleccionado informaba de un éxito nocturnal. Los invitados se agolparon luego de las 7 de la noche en el coliseo Jesús Hernán Valencia, para apartar una privilegiada ubicación que les dejara observar y bailar al son de las letras, ritmos y melodías de los artistas invitados.
Los Pepeseños se la gozaron en el megaconcierto con artistas de la talla internacional del salsero Willy García, los Embajadores Vallenatos, Gaby Hinestroza, Mixter Blak, el rey del bunde, Alex Pichi y la revelación femenina del Vallenato en la regiòn, Yorly Mosquera (la Morenaza). Fue una noche de luna y de ensueño nunca vista en un municipio del Chocó, donde todos los artistas dejaron en la tarima lo mejor de su repertorio. Alcaldes visitantes, representantes a la cámara y otros personajes se unieron al espectáculo que terminó a las 8 de la mañana del día 3 de enero. La amplificación de Cheito Producciones se conjugó con la velada exitosa que arrancó el dos de enero a las 7 de la noche.
El arroz bochinche y comida gratis
Me sorprendió la familia Mosquera Mosquera, cuando me acerqué a su carpa y fogón de leña para pedirle que cuánto me costaría un plato de sancocho de carne o de pollo. A lo que me contesto: “aquí nadie tiene que pagar un solo peso por comida servida. Es una tradición del Festival del Agua atender gratis a todos los asistentes, para lo cual nos preparamos durante todo el año. Los productos que usted se come aquí, me dijo orgullosa y sonriente, nos lo proporciona la tierra y el río que usted ve a su alrededor, por eso hay que protegerlo y cuidarlo. Con un bienvenido y el plato ofrecido, remató su explicación.
Luego recorrí los puntos de venta de los vendajes y allí me encontré con el arroz bochinche, guarapo de caña, pasteles de cerdo, empañadas de queso, pescado desmechado, chanfaina con arroz, patacón con queso, chicha de maíz, guarapo de caña, enyucados, jugos naturales de lulo, borojó, piña chocoanos y la internacional balsámica, una botella que lleva en su interior licores y hierbas aromáticas de apellidos eróticos y exóticos. Un brebaje que potencializa la actividad sexual, dicen sus vendedores y reafirman sus consumidores.
Una joven, de 25 años aproximadamente, afro y reservada con su nombre, me dijo que el arroz bochinche contiene pollo, verduras, salchichas y el secreto pepeseño; y que su nombre se debe al disfrute social de juventud en plan de paseo, donde las jovencitas y jovencitos planean y ejecutan una salida al río o a la quebrada, y en torno a la preparación del mismo en el fogón, hablan de los últimos acontecimientos del municipio, del pueblo, del colegio, de la casa, del barrio, de los profesores, de los novios, de la recién embarazada y de las infidelias. Nadie se queda por fuera del bochinche, me remarcó la amable vendedora, quien me invitò a degustar.
Agradecimientos al alcalde Gilder Palacios. Un joven abogado que diseñó, organizó este espectacular festejo. Lo vimos en franela y pantaloneta trabajando horas antes del comienzo de las actividades. Cortando madera, armando carpas y coordinando cada uno de las actividades para ofrecernos un cómoda y agradable estadía. Y en la noche, atendiendo a sus más de 3.000 invitados. De allí que todos los cantantes lo llamaron a la tarima para hacerle el debido reconocimiento. Los asistentes le tributaron un aplauso sostenido por su despliegue y trabajo en beneficio de la cultura y del medio ambiente en el municipio del Medio Baudò.
Donde queda Pie de Pepè. A Pie de Pepé se llega por vía carreteable desde Quibdó, recorriendo una distancia de 96 kilómetros, pasando por el municipio de Istmina, al sur del Chocó. Desde Pereira, 140 kilómetros carreteables, superando a Tadó y a Istmina y en un recorrido que tarda 9 horas. Por vía marítima y fluvial desde Buenaventura, atravesando a Pizarro, sobre el océano Pacífico, para luego introducirse en la majestuosidad del río Baudò, padre del afluente llamado Pepé. Tiempo de recorrido en lancha rápida: 6 horas.
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