El Abogado Jorge Iván Mina Lasso dejó constancia en la Naciones Unidas de su preocupación por los derechos de los miembros afrocolombianos de la Fuerza Pública en Colombia. Fotos: Prensa JIML.

Durante el Foro Permanente de Líderes Afrodescendientes, desarrollado en las Naciones Unidas en la ciudad de Nueva York el pasado 16 de abril, el expatrullero de la Policía y abogado defensor de los derechos de la población afrodescendiente, Jorge Iván Mina Lasso, alzó su voz en defensa de los integrantes de la fuerza pública y del difícil acceso de los afrocolombianos, negros, raizales y palenqueros a las esferas de poder.

El también director ejecutivo de la Corporación Colegio de Abogados Afrodescendientes intervino en representación de soldados, policías, marinos, aviadores y otros miembros de la fuerza pública, quienes —según sus palabras— han sido discriminados tanto en el acceso como en los procesos de ascenso dentro de sus respectivas ramas.

«Se debe crear un fondo global para garantizar que los jóvenes, mujeres y hombres negros puedan formar parte del nivel directivo de la fuerza pública: Ejército, Armada, Fuerza Aérea y Policía. Los Estados deben comprometerse a no revictimizar y, desde esos espacios, fomentar el respeto hacia nuestros hermanos afrodescendientes.»

Jorge Iván Mina Lasso

Ponencia: Ausencia de Políticas Públicas de Inclusión de los Miembros de la Comunidad Negra en el Nivel Directivo Por Jorge Iván Mina Lasso, Director Ejecutivo de la Corporación Colegio de Abogados Afrodescendientes

Desde la Corporación Colegio de Abogados Afrodescendientes agradecemos al presidente del Foro y a las delegaciones asistentes.

En América Latina, y particularmente en Colombia, a pesar de los mandatos del Decenio Internacional para los Afrodescendientes (2015-2024), acceder a cargos de poder, dirección y mando —como ser ministro— sigue siendo un desafío. Hasta la fecha, solo 15 afrocolombianos han alcanzado esta dignidad, generalmente por coyuntura más que como resultado de una agenda propia de los afrodescendientes.

Situación similar ocurre en las Fuerzas Militares y la Policía Nacional. El primer general negro en Colombia fue el oficial de Policía Luis Alberto Moore Perea, en 2006. Nueve años después, apenas un segundo afrodescendiente alcanzó el grado de general: el coronel Álex Mena, seleccionado el 25 de octubre de 2024.

Acceder a la carrera de Oficial Superior o Oficial General exige más de 25 o 30 años de servicio exitoso. Sin embargo, los oficiales afrodescendientes enfrentan mayores obstáculos: son aislados, marginados y, en muchos casos, víctimas de acoso laboral y discriminación, lo que les impide ascender. Se utilizan argucias jurídicas para excluirlos de las líneas de mando, evitando su promoción a grados superiores como coronel o general, y se les retira del servicio bajo argumentos no válidos ni objetivos.

La discriminación racial prevalece en las decisiones estatales que afectan a oficiales afrocolombianos. Por ello, se debe activar mecanismos de protección internacional para evaluar su situación como sujetos de especial protección, diseñar medidas que resguarden a los miembros afrodescendientes de la fuerza pública, y evitar su persecución y discriminación sistemática.

Los actos discriminatorios hacia los miembros afrodescendientes de la fuerza pública son evidentes, incluso en las Juntas Asesoras del Ministerio de Defensa Nacional.

Es indispensable:

  • Proteger adecuadamente los derechos en riesgo.
  • Aplicar un enfoque diferencial que reconozca a los afrodescendientes como población de especial protección.
  • Adoptar medidas afirmativas para promover su inclusión en niveles directivos de las fuerzas militares y de policía.
  • Recomendar al gobierno y a los jueces que adopten decisiones con enfoque diferencial, protegiendo a quienes se encuentren en situación de vulnerabilidad y procurando una igualdad real y efectiva, bajo los principios de equidad e inclusión.

Muchas decisiones administrativas y judiciales han perpetuado la discriminación racial al desconocer la situación de debilidad manifiesta de las víctimas, reforzando sistemas anacrónicos y procedimientos inflexibles que terminan revictimizándolas.

Según el Observatorio del Colegio de Abogados Afrodescendientes de Colombia, actualmente existen solo cuatro oficiales afrodescendientes en servicio activo: un brigadier general en el Ejército, un teniente coronel en la Policía, un teniente coronel en la Fuerza Aérea y un capitán de navío en la Armada Nacional, lo que representa apenas el 0,206 % del total de oficiales.

Por ello, solicitamos que el Foro Permanente recomiende a los Estados miembros:

  • Adoptar políticas de reparación e inclusión que permitan a los afrodescendientes alcanzar niveles de poder en las fuerzas militares y de policía.
  • Implementar una justa nivelación salarial.
  • Mejorar los sistemas de ascenso para garantizar igualdad de oportunidades.

Los oficiales afrodescendientes sufren una doble discriminación: de parte del Estado, de la sociedad, e incluso de sectores dentro de su propia comunidad, donde a veces no se reconoce a los militares y policías afro como parte de la diáspora.

Es necesario crear un fondo global que asegure que los jóvenes, mujeres y hombres negros puedan integrarse en niveles directivos de la fuerza pública, con compromisos estatales de no revictimización, y desde allí promover el respeto y la inclusión.

 

«Si el policía te defiende, ¿quién defiende al policía negro?»

Las Naciones Unidas es el organismo internacional que reúne a 193 países, cuyos miembros tienen como función mantener la paz y seguridad internacionales, fomentar relaciones de amistad entre las naciones, lograr la cooperación internacional para solucionar problemas globales y servir de centro que armonice las acciones de las naciones.