Pedro Adán Torres, es un convencido que la perseverancia en mantener vivos los valores ancestrales y la fe cristiana son el camino para que sus comunidades avancen en su desarrollo personal. / Foto archivo privado.

Pedro Adán Torres, es un reconocido líder palenquero y representante de esta comunidad a nivel nacional e internacional, que con su trabajo, emprendimiento y dedicación promueve los talentos humanos asentados en su territorio. Es un líder que con valores cristianos motiva a su comunidad hacia la resiliencia y que hagan respetar sus derechos. La discriminación lo hizo más fuerte.

Por Antonio Sánchez/ El AfroBogotano.

Entrevista.

El AfroBogotano, – ¿Quién es Pedro Adán Torres?

Pedro Adán Torres, – Yo soy un líder cristiano afrodescendiente nacido en el primer pueblo libre de América el 10 de diciembre de 1975, llamado Palenque, en uno de los barrios emblemáticos donde fluye la cultura palenquera, que es el barrio de Chopacho. Desde muy niño he trabajado todo lo que es la cultura palenquera, yo soy narrador oral de los cuentos y leyendas de la comunidad palenquera.

¿El AfroB, – Qué recuerda de esa niñez en Barranquilla, luego de salir de Palenque?

P.A.T,-Tuve la oportunidad de salir de Palenque, en donde fui criado en los primeros años por mis abuelos, pero mis padres vivían en Barranquilla. Mi madre era vendedora ambulante de envueltos de maíz o bollos, y mi diario acontecer era caminar las calles de Barranquilla al lado de mi madre ofreciendo alegrías, bollos y cocadas.

¿El AfroB, – ¿Y qué pasó en ese entonces con sus estudios?

P.A.T,-Logré terminar la primaria, lo cual no fue fácil porque yo venía de cursar cuarto grado en la escuela rural mixta de San Basilio de Palenque; en el quinto grado me tocó estudiarlo en la Escuela 34 Mixta en Barranquilla, donde había una niña que me decía todos los días “Negrito vende cocada” y eso me entristecía porque me discriminaba sólo por el hecho de que yo era negro y vendía cocadas. Pero un día me di cuenta que la niña le recibía un helado a alguien en la reja del colegio entonces se lo comuniqué a la rectora y ella me dijo que ese era su papá, entonces en ese momento pensé ¿Cuál es la diferencia de los padres de esta niña conmigo? La única diferencia es que los papás de ella vendían helados y la mía vendía alegrías que es un producto que venden las palenqueras, el cual es un dulce hecho a base de niyo, panela y coco; entonces yo entre en el salón y les dije a todos “Él papá de María lo que vende es helado” y esa niña me quiso matar en el salón, desde ese día se acabó el bullying en mi contra.

¿El AfroB, – ¿Usted pasó una vida más que difícil en su niñez, qué piensa ahora de esas experiencias?

P.A.T,-Luego de mis estudios de primaria llegó el bachillerato y seguía ayudando a mi madre,en las ventas ambulantes de dulces tradicionales: cocadas, caballitos, enyucados, bollos y buñuelos. Recuerdo que en los buses no nos querían transportar por la carga que llevábamos, uno que otro chófer, nos permitía subir pero decía “los llevo pero se suben por la puerta de atrás cuando yo oía eso veía al cielo y pensaba: “Dios mío yo tengo que estudiar algo para sacar adelante a mi familia”. Terminé el bachillerato, y me enamoré fue de una muchacha blanquita, pero me dijo que no podía ser mi novia porque yo era un vendedor de alegría, bollos y cocadas, entonces yo le decía a mi mamá que no iba a vender más eso. Mi mamá tenía un carácter bastante fuerte y me dijo: “Venga acá, ¿Usted está loco? Si una mujer no lo quiere como es, entonces esa no es la mujer para usted. Dios le dará otra mujer”, entonces tomé la decisión de separarme de esa muchacha y seguir vendiendo mis alegrías, bollos y cocadas.

El AfroB,- ¿Y cómo lo recibió la Universidad?

P.A.T,-Fue tremendamente difícil, Yo vendía mis cocadas por la plaza San Nicolás, hasta las 5 de la tarde, y en la noche me iba a la Universidad Simón Bolívar a estudiar. Un día no pude vender porque en Barranquilla se hacen unos arroyos grandísimos, entonces empezó a llover y no pude vender. Con la ponchera y el canasto lleno de cocadas, alegrías y bollos de mazorca, de queso y de  angelito, me cogieron las 5 de la tarde, así que me tuve que ir con mis dulces y bollos  para la Universidad, pero llegué tarde ; recuerdo que había un profesor de Derecho penal general negro(el doctor Esteban Páez Polo)  quien me dijo: “Usted no me vuelve a llegar tarde porque usted es negro” yo me reí y le dije: “Usted también es negro” a lo que él respondió “Los negros tenemos que ser los mejores y la puntualidad debe ser una de sus virtudes”.

¿El AfroB, – ¿Pero usted también vendías bollos de maíz blanco, cuénteme cómo le iba en sus jornadas?

P.A.T,-Recuerdo que un día yo no había vendido ni un solo bollo, pero en un teatro que estaba en una de las esquinas de Barranquilla, había un señor que vendía queso y él me guardaba el canasto mientras yo entraba a clase a la universidad. Se lo entregué, y a pocos pasos me regresé y compré dos libras de queso para emparedárselo a los bollos y llevarlos a vender en el salón de clase. Una voz dentro de mí, decía que no fuera hacer el ridículo con mis compañeros y el profesor, pero al final me atreví a ofertar el “Matrimonio”, así lo llamé. Cuando entro al aula me encuentro con el profesor, quien me voltea a ver, segidamente, le llevo el pedazo de bollo con queso y él se me queda mirando. Entonces me voy por cada silla dándole a cada compañero un pedazo de bollo con el queso metido en la mitad, y un compañero les dijo: “Coman que el negro está regalando” entonces cuando todos ya lo estaban disfrutando, volteé y les dije: “A 250 pesos”. En la Universidad me empezaron a llamar bollito. “No por lo bonito sino por el olor a bollo que yo llevaba” El señor de la tienda se levantó en mi contra porque él ya no vendía arepa, pan o empanada, porque la gente quería bollo con queso.

San Basilio de Palenque, fue declarado Patrimonio Cultural e Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.

Aquí en San Basilio de Palenque, nació Pedro Adán Torres, pueblo fundado por los esclavos fugados de Cartagena de Indias y que fue declarado Patrimonio Cultural e Inmaterial de la Humanidad por la Unesco, por ser el primer pueblo libre de la América colonial, El líder Palenquero aún conserva las tradiciones como el lenguaje, la comida, el baile, y cultura propia de los africanos. Esta población de esclavos liberados por Benkos Domingo Biohó, está ubicada a 50 kilómetros de la ciudad de Cartagena.

¿El AfroB, -¿Qué fue lo que más le sorprendió de salir de Palenque a una ciudad como lo es Barranquilla?

Cuando yo salí de Palenque, en ese momento había una canción que decía “Yo me vine de Palenque negra, yo me vine de Palenque negra y no quiero que me digan na’, y no quiero que me digan na’ porque yo aquí vine a progresar”. En ese tiempo, tu sabes que salíamos en unos carritos que tenían unas banquetas de lado y lado, pero yo no me senté de lado, sino que me senté mirando al revés, como el carro me iba llevando y las lágrimas se me iban saliendo al dejar mi pueblo, buscando un futuro mejor. Llego a Barranquilla, donde los negros estaban ubicados en el suroccidente de la ciudad, donde era frecuente “el paracaídas” que no es otra cosa que nuestras necesidades básicas las hacíamos en una bolsa que luego tirábamos. Eso era lo que llamábamos paracaídas, ya que le podía caer a otro en el patio de su casa.

¿El AfroB, – ¿Y ante esas carencias, cuáles fueron sus primeros avances como miembro de esa comunidad?

P.A.T,-Le cuento que no había sistema de alcantarillado ni agua potable, entonces debíamos buscar el agua en mula o esperar a que los carrotanques llegaran. Como líder negro inicio a organizar actividades que mejoraran la situación del sector, y posteriormente me eligen edil de la comuna 2. Y dentro mis promesas, hago realidad la instalación del gas y la energía a barrios como la Manga, Nueva Colombia. Hice un trabajo comunitario e incluso llegué a ser presidente de la junta administradora local , JAL.

¿El AfroB, -Cuál es el camino para que el hombre afro se empodere y crezca como hombre de bien?

P.A.T,-Primero que todo quiero agradecer a Dios y a Barranquilla, que es una ciudad de oportunidades, una ciudad donde creo que Dios me ha colocado y desde aquí se que con el deber, fuerza y la devoción sobrenatural del espíritu santo, llegaremos a los espacios reales de participación ciudadana a defender los derechos de nuestra gente. En segundo lugar, aquí hemos estado trabajando por la educación, estamos trabajando desde la Fundación Educaribe, que es la Fundación para el Fomento de la Educación Técnica y Tecnológica del Caribe. Desde esta Institución hemos logrado varias cosas; primero hemos logrado convertir en vigilantes, escoltas, supervisores y operadores de medios tecnológicos a más de 7mil personas en el Caribe Colombiano gracias a los convenios de educación interinstitucional con academias de vigilancia y seguridad privada.

Vista parcial del barrio popular La Manga, en Barranquilla.

¿El AfroB, – ¿Y se le reconoce a usted y a su equipo este trabajo social y de liderazgo?

P.A.T,-¿Sabe que es lo mejor? Que llego a un centro comercial o a un aeropuerto y los vigilantes me abrazan y me dan las gracias, entonces esa es la mejor satisfacción que me he llevado. Le cuento que logramos un avance a nivel de educación técnica, tecnológica y profesional; más de 1.500 personas prepararse. Tenemos una juventud pujante y capacitada. Ahorita estamos liderando un convenio para entregar 3.500 becas educativas de asistencia humanitaria por covid 19 para afrodescendientes de los estratos 1 y 2 en todo el Caribe. Son cosas que estamos haciendo porque Dios nos lo ha permitido hacerlas y la gente está muy contenta. La solidaridad en tiempos luctuosos la manifestamos con el aporte de ataúdes. Hoy todos nuestros afiliados están asegurados y reciben además de una atención funeraria, también acceden a unos recursos económicos para que, en ese tiempo de duelo, la familia pueda salir adelante. Eso es lo que estamos haciendo desde la fundación

Le cuento que Educaribe y el movimiento Misca es también una organización de comunidades negras donde estamos llevando en curso programas de atención integral en vivienda y otros planes, programas y proyectos. Y el mejor reconocimiento es que me acuesto tranquilo por haber contribuido al bienestar de las comunidades vulnerables.

¿El AfroB, – ¿Pero este tipo de acciones se necesitan recursos económicos y de unos aliados, ¿de dónde provienen los dineros y quienes lo acompañan para solventar este trabajo lleno de filantropía’

Mucha gente está satisfecha por los beneficios que están recibiendo, tenemos un reconocimiento de la sociedad; sea esta la oportunidad para agradecer a todas aquellas personas de buen corazón, que con sus donaciones han hecho posible esta importante labor “ayudándonos a ayudar” ya que todo esto lo hacemos gracias a sus donaciones.    Hay mucha gente de las empresas privadas que siembran y apoyan, personas naturales  y jurídicas que aportan su granito de arena para que esto sea real y efectivo en la vida real. Hoy por ejemplo: ya están  recibiendo clases 200 nuevas personas que acaban de empezar su carrera técnica como auxiliares de enfermería, auxiliar administrativo en salud, salud pública, auxiliar farmacéutico, atención integral a la primera infancia y secretariado ejecutivo y caja registradora  a través de convenios que hemos firmado con  diferentes instituciones técnicas de educación para el trabajo y desarrollo humano, estos convenios benefician  a las comunidades vulnerables donde obviamente entran los negros, afrocolombianos raizales y palenqueros, pero también hay gente de las comunidades indígenas, desplazados por la violencia. Es un trabajo que estamos haciendo no solo de forma social, sino también de manera espiritual. En la medida que el hombre o mujer tengan una oportunidad laboral, su vida cambia. Usted cuando tiene un empleo, su vida se transforma, camina diferente, en su casa lo miran diferente y contribuye a una mejor sociedad.

“Yo soy tamborero, pero además soy hablante de mi lengua y narrador oral de mitos, cuentos y leyendas ancestrales. Soy un hombre cristiano que cree en el padre, el hijo y espíritu Santo de Dios, pertenezco a la “Misión carismática internacional”, en Barranquilla, yo creo que la mayor satisfacción es conocer a ese Cristo vivo, he visto milagros en mi familia, yo soy un hombre restaurado por Dios con una noble familia, con unos hijos qué también están siguiendo los caminos. La gente esta creciendo espiritualmente”.

¿El AfroB, – ¿Cuénteme un poco de su tronco familiar, cómo está compuesta su familia?

Como todo palenquero, nuestra familia es numerosa, tengo 6 hijas y un hijo, en total son 7 hijos. Yo creo que he sido bendecido grandemente por Dios, tengo una esposa a la cual amo y le doy gloria a Dios por haberla puesto en mi camino, ella es la profesora Astrid Cecilia Cassiani Ávila, palenquera como yo. Yo siempre dije que mi esposa tenía que ser de mi comunidad. porque como digo yo “palenquero para su palenquera”, nuestros hijos también son palenqueros, entienden, comprenden y practican nuestra cultura y hablan nuestra lengua. MI padre Pedro Torres, partió a la presencia del señor hace 5 años, mi madre aún vive y se llama María del Carmen Pérez Padilla. Fui criado por mis abuelos paternos en ese gran palenque, en Chopacho, la Vieja Magdalena y el viejo Adán Torres. En Palenque todos preservamos la cultura. Vivimos en el municipio de Galapa, dentro de los terrenos del Consejo Comunitario Palenque-Vereda de las 300; mi abuela materna, Tomasa Padilla llegó aquí en 1.923, en este territorio nosotros preservados, la gastronomía, los bailes, rituales y todo lo que tenga que ver con la cultura palenquera.

El tema cultural va ligado al crecimiento personal, y obviamente a la ancestralidad de estas comunidades. ¿Cuál es su fuerte cultural?

Yo soy tamborero, pero además soy hablante de mi lengua y narrador oral de mitos, cuentos y leyendas ancestrales. Soy un hombre cristiano que cree en el padre, el hijo y espíritu Santo de Dios, pertenezco a la “Misión carismática internacional”, en Barranquilla , yo creo que la mayor satisfacción es conocer a ese Cristo vivo, he visto milagros en mi familia, yo soy un hombre restaurado por Dios con una noble familia, con unos hijos qué también están siguiendo los caminos. La gente está creciendo espiritualmente.

El AfroBogotano, en esta primera entrega, les cuenta que mujeres y hombres como Pedro Adán Torres, hacen de sus carencias sociales y económicas su aliada fortaleza, que los convierten en referentes comunitarios para los entornos donde día a día construyen sociedad. 

Créditos/ Fotos
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