Una mezcla de chirimía y jazz interpretada por el grupo musical de Colombia Negra que puso a bailar a los Afrobogotanos en el Teatro Colón. / Fotos/ Antonio Sánchez

Esperanza Biohó y Alexis Lozano, dos de las más importantes figuras del folclor y la música del pacífico colombiano, presentaron la noche del miércoles pasado en Bogotá, lo mejor de su creación artística en las obras “Tributo a Mis Mayores” y “La Nueva Yo”, una apuesta musical que arrebató dulcemente los aplausos de los asistentes al emblemático Teatro Colón de Bogotá.

Por Antonio Sánchez/ El AfroBogotano.

Con el mejor traje, con la mejor sonrisa y la expectativa reflejada en sus rostros de piel afrocolombiana, fueron llegando uno tras otro al teatro de los capitalinos. Todos eran personajes sin importar los cargos, los títulos académicos o la despampanante pinta de colores en sus túnicas y turbantes que destellaban en el lobby del escenario escogido para el tamaño e histórico encuentro de la población afro, raizal y palenquera. Al jolgorio se unieron y mucho se notaron, mestizos bogotanos con sabor a salsa en sus miradas.

Los anfitriones: La directora de Colombia Negra, Esperanza Biohó, Alexis Lozano, fundador y director de Guayacán Orquesta, Angélica Mayolo, Ministra de Cultura, la Consultiva Distrital de Comunidades Negras y Claudia del Valle, directora del Teatro Colón. Este pomposo ramillete, hicieron yunta para abrirle las puertas de este esquivo escenario para las etnias y exhibir una inédita postal de la herencia africana repleta de abozao, tamborito, juga, currulaos, patacoré y el infaltable bunde, ritmos musicales de la región del pacífico colombiano, finamente ensamblados por la orquesta de Colombia Negra, conformada por maravillosos músicos profesionales y dirigida por los maestros Lozano y Biohó.

Las 780 sillas que reposan en los 2400 metros cuadrados del bautizado teatro nacional de los colombianos, vecino de la Cancillería Colombiana y ubicado en la localidad colonial y turística de la Candelaria, esperaban la ocupación de los hijos del Chocó, Cauca Valle, Nariño, Bogotá y San Andrés, principalmente.  El tapete rojo, uno a uno los condujo a la platea y palcos glamurosos para presenciar y deleitarse del invento artístico de dos de sus simbólicos parientes y de esa camada de jóvenes músicos.

El comunicador de Colombia Negra, Esteban Lugo Perea, hijo de Esperanza Biohó, abrió la esperada noche de fiesta afrocolombiana: reconocimientos a la Ministra de Cultura, Angélica Mayolo, a Claudia del Valle, directora del Teatro Colón, y los miembros de la Consultiva Distrital de Comunidades Negras. Sin ellos, dijo el presentador, no hubiese sido posible ocupar este espacio de la cultura colombiana.

Homenajes y merecimientos

Mientras avanzaba la programación de “Tributo a mis Mayores”, con el himno cantado a capela por el internacional artista raizal, Haldor Christopher García, el hombre de la “Cima” y la insignia artística de la isla de San Andrés, el tapete rojo y las sillas del teatro hospedaban a sus invitados, cada vez más numerosos.

El retumbe y la lírica voz folclórica de la Juradoseña Leonela Mosquera, luego de la presentación del video, el telón le dio la bienvenida al sencillo “La Nueva Yo” una fusión de chirimía chocoana y jazz norteamericano, en la que el maestro director de Guayacán Orquesta, Alexis Lozano, junto a sus aventajados músicos, le imprime ribetes fundacionales a la partitura nacional e internacional. Una melodía de la compositora y coreógrafa Esperanza Biohó, que arrancó palmoteos y movimientos de cintura de todos sus paisanos, dentro de un jolgorio con luminosa complicidad de los destellos y movimientos de los chorros de luces multicolores que parecían danzar por entre el precioso escenario. Un bienvenido y delirante abrebocas de la fiesta decembrina al mejor estilo afrocolombiano.

El broche de oro a la noche de intérpretes, se acopló el condoteño y famoso cantante Darwin Mosquera (Sábalo), quien, hombro a hombro, cantó y coreó musicalidades de gran valía para el folclor del pacífico.

La recepción a ritmo de clarinete, tambora, bombardino y saxofón, hizo un alto en su melodiosa noche, para homenajear con el premio Guachupé de Oro a líderes como la activista afro Rosita Solís y al legendario músico de la estirpe de los Cuao, de Santa Marta, al heredero tamborero, José Ignacio Cuao. Los agasajados se vincularon a los también distinguidos, Lourdes Gonzales Iglesias; santera yoruba y antropóloga; y al antropólogo Jesús Alberto Grueso, de Timbiquí; así mismo, a Nohora Milena Trufovka, antropóloga de la universidad de los Andes. Merecimientos por sus aportes a la ciencia, al folclor y a mantener con sus investigaciones el legado de los ancestros de la diáspora africana en Colombia. Cortesías recibidas en días anteriores a esta celebración.

Sevigné Copete, una de las cofundadoras de la lucha afrobogotana y miembro de la Consultiva Distrital, la docente universitaria Sidenia Rovira, los también militantes y defensores de la causa afro en Bogotá, Ana Palacios, Yulisa Mosquera, Nelson Moreno y la bonaverense Rosita Solís, le regalaron manilla y collar de oro a Alexis Lozano y a Esperanza Biohó, como un gesto de admiración y reconocimiento a sus rutilantes gestas en pro de éste grupo poblacional, al aporte cultural de los colombianos con su amplio inventario de producciones musicales y al enaltecimiento de los valores artísticos, desde la perspectiva afrocolombiana, raizal y palenquera.

Los asistentes al lanzamiento de “La Nueva Yo”, entre sorprendidos y emocionados, disfrutaron del himno afrobogotano; un video que recorre las icónicas calles y lugares de las 20 localidades de la ciudad capital de los colombianos. Una fascinante pieza musical producida por Colombia Negra e interpretada por el barítono de Guapi, Víctor Hugo Rodríguez.

Para que la velada “Tributo a mis Mayores”, fuera aplaudida hasta al final, tuvieron que ver ese puñado de 28 jóvenes que participaron en el montaje como: Leonela Mosquera, Darwin Mosquera, (Sábalo) Luis Junco, Jesús Antonio Cossío, Dyam Palacios, Yassir Parra, Wilson Viveros, Brian Torres y Jackson Martínez, Juan Manuel Lugo, Juanita Eslava, Alejandro Eslava, Yeissón Venté, Andrés Mosquera, Moisés Wills, Yeison Venté y Andrés Díaz.

La otra más y reluciente de las presentaciones de Colombia Negra, fue felicitada por la Ministra de Cultura, Angélica Mayolo, quien se confundió entre los presentes para atender pedidos, recibir felicitaciones, posar para las cámaras y dejar un mensaje de humildad ministerial entre sus paisanos.

Luego de noventa minutos de duración de un capítulo más de la cultura afrocolombiana, el Teatro Colón, dejó de ser el mismo, y Bogotá, escribió para la historia una nueva fiesta afro en sus páginas.

Libardo Asprilla, uno de los asistentes, nos recordó líneas de su libro Tras las Huellas Afrobogotanas: Todas las edificaciones en tiempos de colonia y la república, entre ellas el Teatro Colón, fueron levantadas con las manos callosas de las personas negras afrocolombianas que trabajaban en condiciones de sometimiento. Valga decir: la iglesia catedral primada, el colegio mayor de San Bartolomé; siendo esta la primera institución educativa que se construyó en Bogotá y el colegio mayor de nuestra Señora del Rosario/ Universidad del Rosario, entre otros inmuebles.