De izquierda a derecha: su hermano Sakharov Moreno, la hija Angie Alejandra Moreno, la nieta Shiara Gómez Moreno, Yudy Samira Moreno y su señora madre María Oliva Mena viuda de Moreno/ foto Alejandro Urrego

Allá en Pance, muy cerca de los Farallones de Citará, y en medio de gigantescos árboles frutales, un jardín de flores de exquisitos aromas que perfumaban la romántica noche valluna, se hospedaron sus preferidos invitados que, uno a uno fue llegando a la cita pomposa que su familia y su compañero de vida Carlos Palacios le organizaron con motivo de su cumpleaños número 50.

“Hoy bendigo el útero de mi madre que me contuvo durante 9 meses y que me sigue conteniendo con su fuerza maternal y espiritual”: Yudy Samira Moreno

Por Antonio Sánchez 

Fotos: Alejandro Urrego/ Fundación Biovisual

La bellamente acicalada cumpleañera, entre el desparpajo, la camaradería y el gozo que la caracterizan, luego de la riquísima cena y el intercambio de abrazos y sonrisas por entre las mesas de inmensos ramilletes de flores, cambió su fastuoso traje por camiseta, pantalón jean y zapatillas, al mejor estilo de la mujer sanpachera. El jolgorio y efusiva rumba por entre los andenes de la adornada piscina, rebautizada con su nombre, no se hizo esperar. La reconocida y distinguida Casa Cascajal, uno de los lugares preferido por los caleños para celebrar sus encuentros y fiestas, esta vez fue la anfitriona para homenajear a una de las reconocidas lideresas de la comunidad afrocolombiana, quien, excitada por la música folclórica, encabezó con desbordado entusiasmo las conocidas coreografías de las fiestas de San Francisco de Asís. Todos sus concurrentes se contagiaron de la repentina bailarina y se unieron al jolgorio.

Fe, reflexión, fiesta, devoción y desbordada alegría, fueron los instantes que enmarcaron la colorida gala de cumpleaños de la doctora Yudi Samira Moreno, quien se mostró sorprendida y emocionada ante inusitado despliegue de cortesías y amoríos, organizado por los suyos y seleccionados invitados.

Aires musicales del pacífico colombiano como la Vamo a tumbá, Negra cogé tu Marido, entre otras melodías a base de clarinete, marimba y requinta e interpretados por la afamada orquesta de chirimía Aires de mi Tierra, se encargaron de animar el vistoso ágape hasta pasada la medianoche del pasado 29 de septiembre.

El AfroBogotano, invitado de excepción al festejo, les entrega las reflexiones de Samira y las más importantes postales fotográficas de esa noche de euforia, luz, magia y solemnidad, en donde la comunión y la lectura de la palabra de Dios a través del sacerdote Juan Camilo Cabal Moore, dieron inicio a la encopetada y glamurosa conmemoración de cumpleaños de la chocoanísima Samira.

La vida es hoy… La vida es magia… La vida es amar… La vida es sanar

Cuidemos el corazón, porque de él mana la vida

Aprecio y gratitud por celebrar la vida conmigo

Dios, el universo y mis deidades espirituales hoy me permiten cumplir 50 poderosos años, ha sido un camino de aciertos y desaciertos, de desaprender y aprender a vivir con sentido, de hacer consciencia de lo que implica ser la mayor de 5 hermanos, ser madre de una única hija, tita de una brillante nieta llamada Shiara (Mujer sagrada) y de un bebe que viene en camino, ser una profesional consagrada  a vivir para servir a las comunidades, las regiones y el país, pero también ser compañera idónea de un hombre que se esfuerza todos los días de su existencia en mejorar como ser humano, y me acompaña hombro a hombro en este camino de la Grandeza.

Hoy bendigo el útero de mi madre que me contuvo durante 9 meses y que me sigue conteniendo con su fuerza maternal y espiritual, bendigo a mis hermanos a quienes escucho y me escuchan, bendigo a mi familia biológica extensa porque ellos hacen pate de la manada que acompaña el camino de la madurez, bendigo a ustedes mis amigos y hermanos de la vida que hoy tiene el privilegio de acompañarme en esta mágica y holística celebración de mis 50 años. Mi padre que físicamente no está pero que espiritualmente su fuerza, ejemplo y sabiduría hacen parte de mi existencia todos los días con su poderosa luz que va guiando el camino.

En estos 50 años han existido circunstancias de dolor, queja, rabia, tristeza, impotencia, frustración, cuestionamientos y dudas; todas esas energías bloqueadoras se han ido transmutando en amabilidad, valentía, humildad, amor, silencio, libertad, ternura, calma, sabiduría, en aprender a respirar conscientemente y en abundancia ilimitada; proceso nada fácil, pero han sido pasos de certeza y de búsqueda permanente del foco de mi existencia.

Gratitud con mi vida y sus dinámicas de ida y vuelta, gratitud con todo lo que he experimentado en estos 50 años, eso ha forjado mi carácter, me ha hecho más humana, más creativa, mas compasiva, más coherente, mas intuitiva, mas vital, más espiritual, más justa y equilibrada en mis actuaciones.

Samira Moreno y su compañero de vida Carlos Palacios

La vida es hoy… La vida es magia… La vida es amar… La vida es sanar

Cuidemos el corazón, porque de él mana la vida.

Aprecio y gratitud por celebrar la vida conmigo.