¡Histórico!. Por lo menos Tres millones de personas se tomaron la carrera séptima de Bogotá para decirle no a la guerra, respaldar a las víctimas y avalar los acuerdos firmados entre el Gobierno y las Farc.
Indígenas, Afros, estudiantes, profesionales, raizales, palenqueros, campesinos y los niños de la mano de sus padres alzaron las banderas blancas y se regalaron rosas y claveles de diversos colores como símbolo de amor, solidaridad y un “no están solos”, voz de aliento para las vìctimas, a lo largo de la vía más importante de la Capital colombiana
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